Aportar una alimentación saludable, rica y con producto de calidad es crucial para nuestro equipo. Pero nuestra mirada va mucho más allá de la comida. Asumimos que cada organización es única y, por lo tanto, su comedor también debe poder serlo.

Creemos que desde el servicio de alimentación se pueden implementar mejoras sustanciales en muchos aspectos de la organización. Por eso, trabajamos junto a nuestros clientes para aplicar en el comedor mejoras que les ayuden a cumplir sus objetivos, a la vez que mejoran la experiencia de las personas que comen en él.

Creemos que los comedores son un elemento clave para mejorar la forma en que se relacionan las personas que los utilizan en el día a día, así como las personas que trabajan en ellos. Para conseguirlo, ponemos el foco en la experiencia que estas viven en el comedor, pero también antes y después de pasar por él, centrándonos en sus necesidades y deseos. Les observamos, les escuchamos y proponemos, en coordinación con el cliente, mejoras para hacer del comedor una experiencia enriquecedora y divertida.

Nunca dejamos de preguntarnos cómo el comedor puede mejorar la vida de las personas que comen y trabajan en él. Esto nos ha llevado a implantar constantemente pequeñas mejoras en el día a día, pero también a provocar grandes cambios conceptuales tanto en el servicio como en su diseño.

En 2017, creamos una metodología de co-diseño del servicio de comedor en centros educativos que fue seleccionada finalista de los premios internacionales Service Design Awards como uno de los mejores diseños de servicio del año a nivel mundial.

Esta metodología pone a las personas en el centro del servicio y las implica en el diseño del mismo. A día de hoy, este modelo se ha convertido en un referente del sector y lo aplicamos también en residencias de mayores y empresas.

Las personas están en el centro de todo lo que hacemos. Desde quienes comen en nuestros comedores a diario, hasta nuestro propio equipo de trabajo, pasando por todas las personas que forman parte del ecosistema: familiares, proveedores, equipo de trabajo…

Esta forma de entender el comedor también afecta a la forma en que nos relacionamos con nuestros clientes, creando un equipo conexionado y alineado para alcanzar aquellos objetivos que conjuntamente marcamos.

Defendemos un modelo de alto valor añadido y trabajamos para que así sea percibido por todas las personas que forman parte del ecosistema del comedor. Ayudamos a nuestros clientes a diferenciarse a través de un modelo innovador y de referencia.

Creemos que nuestros comedores deben tener un impacto positivo en su entorno. Por eso, desarrollamos un plan de compras personalizado que integra el mayor número de proveedores locales, garantizando la calidad de los productos al tiempo que apoyamos la economía local. Además, garantizamos el cuidado la formación de las personas que forman parte de nuestros equipos, como pieza angular de la prestación de un buen servicio.